La pasada noche y ante un público inicial de 1.500 personas, comenzó la primera noche de la última ronda de carnaval. Una noche que animaba a concurrir a disfrutar.
Hoy culminará el certamen con las actuaciones de Parodistas Sinvergüenzas, Murga La Fulana y Humoristas Los P-ques.
Finalizada la ronda, se darán los fallos de los premios y las menciones.
Los premios propiamente se entregarán el próximo sábado en la ronda de ganadores.
Las entradas subieron su costo a 100 pesos. Algo totalmente desafortunado teniendo en cuenta que de los últimos años, este es el carnaval que menos público ha llevado.
Jardín del Pueblo
La murga del Barrio Jardín que este año sale desde la sede de Los Sauces, dejó todo en el escenario.
Prácticamente no se agregaron mechas, a no ser en la parte del couplé donde aparece Bonomi, que la total ductilidad escénica de Pablo Coll, le permite esas improvisaciones. Coll que por otra parte se perfila como mejor cupletero.
Un comienzo que despeinó con el sonido. Lo que las rondas anteriores se esperaba de jardín, la explosión, sentir el sonido en la cara y quizás al principio fue hasta demasiado.
Jardín hizo ajuste en los coros sobre todo que era donde más se notaban ciertos desfasajes en las entradas y terminaciones. Luego se agregaron detalles de vestuario y puesta en escena.
Se extraña de Jardín que no tenga la crítica local. La esencia de la murga es la crítica, y es lo que la gente espera, la hay, pero en temas netamente nacionales y sin marcar una tendencia como nos tienen acostumbrados. Quizás ese es el único debe de la murga. El toque de humor está dado por Pablo Coll, en forma cuotificada, acorde a la estética del espectáculo.
Un ensamble coral perfecto que anoche no mostró defectos. Momentos que logran emocionar. Quizás casi al final, la murga se dejó llevar por la emoción del deber cumplido y el exceso de energía se sintió, pero fue como festejar un gol en el minuto final.
Las duplas de Diego Guichón y Diego Sosa que logran transmitir emoción al público le dan el marco de emoción esperado.
Diego Guichón y Pablo Moreira (Teenagers) son a mi entender las mejores voces masculinas del certamen.
Una noche redonda para Jardín del Pueblo, donde se reencontró con su público de pie esperando devolver en un abrazo, lo que la murga le brindó.
Revista La Selección
Desde el arranque del concurso que vemos a este conjunto como firme candidato a mejor espectáculo de carnaval, como varias menciones generales.
Absolutamente ningún detalle librado al azar.
Ya de por si no había en la segunda ronda. Se reforzó todo, coreografías, interpretación escénica, escenografía, maquillaje, vestuario.
Quizás el cambio de vestuario de Blanquita Cianciarullo, interpretada por Georgina Giamberini, fue el toque diferente, que al no estar ataviada con la ropa de bailarina, quedó como colgado, pero el personaje explicó este cambio de vestuario, en mechas que la actriz se permitió sabiendo que era una noche para disfrutarla, debido al desempeño de todo el concurso.
Vocalmente, detalles muy pequeños de desafinaciones, pero en la última ronda estamos hilando fino. No es quien lo hizo peor, sino quien se equivocó menos. Y son errores mínimos de esos que puede causar el exceso natural de adrenalina.
Se mejoró la interpretación de Sebastián Almada, el “Brayan” y sin lugar a dudas que la figura es Georgina Giamberini a quien en lo personal no descarto como ganadora de la figura máxima de carnaval. Galardón que hace años no se le otorga a una mujer en nuestro certamen.
Más allá de los resultados, meta más que cumplida para este grupo debutante en el nombre pero con un muy buen grupo. Sin dudas una muy grata revelación en este certamen.
IS.



