La sanducera y compositora Laura González Cabezudo dialogó esta mañana en EN PORTADA pero en este caso en su rol de psicóloga.
Esta situación -la de la pandemia- «nos sorprendió y de un día para el otro tuvimos que buscar nuevas formas de manejarnos. El aislamiento para una persona que vive en condiciones de precariedad no es lo mismo que para el que tiene una habitación con el metraje y condiciones adecuadas. Más allá de esta situación nueva, tiene impactos psicológicos inmediatos y a largo plazo» comenzó diciéndonos.
«Nos ha desacomodado nuestra vida, nuestras actividades cotidianas nos alteraron la vida. Debimos resignar las formas de nuestras actividades y eso genera estrés e incertidumbre porque no sabemos cuanto va a durar» detalló.
González agregó que «la incertidumbre genera angustia y mucha gente no la puede gestionar. Se ha quedado sin los medios para hacerlo. No podés hacer las cosas que te dan felicidad y la felicidad es una protección contra la enfermedad».
Entiende que «la distancia física debe tener un componente importante de afectividad. Usando las redes, las videollamadas. El cariño expresado de otra manera. Tenemos que ir a otras formas de encuentro en condiciones más adeucadas».
Resaltó lo importante de generar una rutina dentro de la «des rutina» que estamos viviendo.
Dio la idea de generar pequeños proyectos como cosas cotidianas y apropiarse de esos proyectos. Citó el caso de pintar las aberturas de su casa.
