Se presentó por segunda vez la obra “Amor, humor y tango” en nuestro precioso teatro, cada vez más lindo.
Sus protagonistas son Georgina Giamberini que hace el papel de Blanquita Ciancarulo y los bailarines Gaspar Godoy, originario de Córdoba, Argentina y la sanducera Carla Mazzolini que se encuentran viviendo en Paysandú por la pandemia que afecta fuertemente Argentina.
Marcelo Goyos es el director de un “producto” muy bien logrado y que mereció la aprobación de las más de 150 personas (por protocolo se podían vender 150 tickets).
De humor y de tango, de eso se trata. Una combinación, una fusión que entretiene y divierte por el ritmo que tiene, por el humor de Blanquita que tiene un muy buen guion y también por la belleza del baile, excelso.
Carla y Gaspar suelen bailar tango escenario y tango salón. En esta oportunidad en el show combinaron ambos.
Se genera una linda historia de una tangera que se encuentra con los dos bailarines y se potencian ambos, un humor que deleita repetidas veces al público por su sencillez y su efectividad y la presencia de dos figuras del baile de nivel internacional. Apoteótico!
Paysandú se puso de pie para acariciar el alma de los artistas y un sostenido aplauso acompañó el final.
Se habló de Eusebio Gobbi, el sanducero que llevó el tango a Europa. No podía faltar la referencia a Paysandú.
Un libreto muy bien armado y un público que volvió responder magníficamente, en todo sentido.
Al final Georgina agradeció al público y a la gestión saliente de la Intendencia que recordó hizo mucho por los artistas, augurando que se puedan mantener esas condiciones con el gobierno entrante.
En este último tiempo donde los artistas han soportado estoicamente la pandemia, la IDP dio condiciones muy ventajosas para que pudieran trabajar. Es que es lo que dignifica, a todos.
La idea original de la obra es de Georgina que aprovechando que los bailarines estaban en Paysandú, pergeñó la obra, los textos y la dirección es de Marcelo Goyos. Los bailarines son los invitados.
