La baja en la venta de cerveza en el correr de este año ha sido notoria. Las razones son variadas y se pueden explicar por las bajas temperaturas de este invierno, la exigencia en los controles -alcohol 0- y el patrullaje de la Policía Republicana según pudo comprobar 20Once.
El portal consultó a expendios tales como kioscos, 24 horas y almacenes. En la zona de plaza Artigas la merma fue muy importante. Era un lugar preferido para el descontrol y el mismo se ha encauzado.
Un vendedor que pidió no identificarse nos dijo, «le dejamos a un 24 horas lo mismo que a un almacén, 3 o 4 casilleros por semana. El frío incidió sí, la gente sale menos».
Comparado con el verano se ha vendido menos de la mitad.
La bebida bajó no solo por el invierno sino por el poder adquisitivo dijo un distribuidor.
«En nuestro caso que no tenemos una marca líder creemos que bajó más porque la retracción afecta más a la clase media-baja que nos prefiere».