José L. Verri-Mauricio Dotti
Días pasados recibimos la grata noticia que uno de los clubes de básquetbol más añejos que van quedando en la actualidad, acababa de finalizar una obra largamente esperada por hinchas, allegados, simpatizantes y la población en general. El Colón BBC, fundado el 20 de mayo de 1949, había finalizado el cerramiento de su cancha de básquetbol en un proceso que comenzó en los años ´90 y quedó trunco, pero que tomó fuerza allá por el año 2008, cuando se demolieron las viejas tribunas de la cancha abierta para colocar allí las vigas de lo que es hoy una hermosa realidad: el gimnasio cerrado.
Y si habrá corrido agua bajo este puente, sabemos de muchas cosas que sucedieron y que hicieron bajar los brazos a muchos, pero si hay alguien que permaneció firme y hoy disfruta este presente, es su actual presidente Daniel Richart. Al respecto nos decía “…esto recién comienza, queda mucho por hacer, hay que definir objetivos y que queremos para esta infraestructura…., esto es un club deportivo pero personalmente opino que es fundamental darle importancia a lo social, las instituciones deportivas cumplimos el rol de llenar ciertos vacíos que existen en algunos estamentos de la sociedad, es fundamental darle importancia a la parte social y su aporte a la comunidad…”
Incluso en la parte de la obra que estaba más complicada, un temporal le tiró abajo el muro que da a la casa de Ferro. Ese hecho desgraciado fue sin embargo y paradójicamente el puntapié inicial para que se llegue a este presente. En ese momento apareció la mano amiga de un empresario vinculado a la institución, que se ofreció a trabajar para llegar al cerramiento definitivo si el club conseguía los materiales. En este último aspecto coincide también Juan Masdeu, otro de los que estuvo sosteniendo firme junto a su familia al club en años duros cuando todo parecía una utopía. Dirigente, delegado, entrenador, incluso dándole en 2011 el último gran logro deportivo a la institución cuando Colón se consagraba campeón de honor en Femenino.
Como manifiesta el presidente Richart, “…en todos estos años aparecieron innumerables dificultades, pero fuimos muy imaginativos y hemos logrado lo que nos propusimos…” Es así que en menos de un año se logró cerrar definitivamente los cuatro costados ya que se contaba únicamente con la bóveda asentada en las vigas. “… queda mucho por hacer, “…pintar, arreglar vestuarios, dejar prolijas las instalaciones, y el gran objetivo final, el piso flotante…”
El club se encuentra abocado además a trabajar en un gran proyecto deportivo para la temporada 2017, de carácter moderno, ambicioso y de carácter inclusivo, que incluye variados aspectos entre los que se encuentran obviamente el logro del piso flotante para la institución.
Ya en estos 2 últimos años se han visto logros en lo deportivo, se clasificó a play off en primera división y sub 16, hay más de 50 niños que realizan la actividad, todo esto ha hecho acercar mucha gente que ha visto los avances en lo infraestructural.
Vemos con muy buenos ojos el proyecto institucional y deportivo de este club, ya que se trata de una institución enclavada en una zona donde hay gran cantidad de población, y donde a veces la falta de recursos económicos y humanos hace pensar que no se pueden lograr ciertas cosas. No tenemos dudas que esta institución va a despegar definitivamente a partir de esta obra realizada, para ir retomando poco a poco el sitial que supo tener en sus épocas de gloria.
Es además un gran aliciente para consolidar a ese club en lo social, en lo institucional, y no solamente en lo deportivo, como referente de una zona de gran influencia en los demás barrios y sus alrededores, por citar ejemplos, barrio Olímpico, Vista Hermosa, Cárcel departamental, estadio cerrado, Hospital, Plaza de deportes, Coca Cola, etc.
