Fernando Sollazo
Los tiempos han cambiado en todas las áreas de la vida y en todo el mundo. El básquetbol no es una excepción y podemos escribir muchos cambios que en forma progresiva y a través de los años se han dado. En una época en los clubes sobraban los aspirantes a hacer la mesa de control en forma honoraria, incluso muchas veces fuimos testigos de que hasta se peleaban en el buen sentido de la palabra para representar a su club. Hoy según nos dicen los dirigentes es casi imposible que eso pase, y por ende hubo que adaptarse a esta época. Determinadas tareas, como la de director técnico, equipier, masajista o aguatero como se le decía al que cumplía esa función, en líneas generales las personas asignadas por lo general lo hacían en forma honoraria, salvo excepciones. Y así podemos ir dando otros ejemplos. Lógico que eran otras épocas, la gente tenía más tiempo y menos estrés, ir a cumplir esas tareas era una manera de sentirse bien y colaborar con el club de sus amores. Pero todo fue cambiando porque los compromisos y necesidades de las personas son mayores. Entonces hay menos tiempo, y por supuesto que el tema económico está arriba de la mesa. Todas las funciones se fueron profesionalizando, cursos para tener el título de entrenador, profesores de Educación Física, fisioterapeutas, etc. Y por supuesto que eso tiene su valor, a nadie le regalan un título y para tenerlo hay que estudiar y dejar horas en los estudios. En definitiva los clubes se encontraron con que su presupuesto se aumentó en forma significativa y para enfrentar esta situación tienen que generar más recursos. Somos admiradores del esfuerzo de las instituciones para adaptarse a las reglas que las obligaron a acondicionar sus escenarios, gimnasios cerrados, pisos flotantes, tableros electrónicos, etc. Si en ese sentido se han adaptado a los nuevos tiempos. Ahora bien, creemos que lo que está en el debe es el calendario de actividades, las programaciones. El básquetbol en el mundo ya no es sólo un partido, es un espectáculo. En algunas ocasiones hemos observado que algo se ha intentado hacer. Creemos que en mayores se debe jugar siempre con un preliminar atractivo, tiene que haber una buena amplificación, sorteos con el número de la entrada, alguna movida de algún grupo de baile en el entretiempo. Eso generará sin dudas mayor asistencia de público que aumentará las recaudaciones. En fin, hay muchas cosas por hacer y sabemos que todo esto genera gastos. Pero con ingenio, voluntad, perseverancia, tiempo y vocación se puede lograr. Es simplemente una mera opinión para sumar.