Presentará su libro “Conocerme me hizo libre” el próximo sábado a las 19.30 en el Club Paysandú. Es sanducero y cantó las 20.
-¿Admira a alguien?
A todas las personas que se la juegan, que no se callan, que se la juegan por un mundo más justo e igualitario.
-¿Qué le irrita?
La injusticia pero a nivel personal casi nada. Podría decir que cuando me subestiman e insultan mi inteligencia humana, profesional y relacional, me molesta y lo hago notar.
-Por el contrario, ¿qué le enternece?
Un gesto, una mirada, una vecina de 90 años que saca a pasear su perrita y que dice que la perrita está muy vieja y que tiene que hacer ejercicios. La música y tantos mensajes divinos que recibo por el libro. Mensajes de apoyo de gente que conozco y gente que no conozco que se acuerda de cosas que hice y dije y yo no me acordaba.
-¿Cuál cree que es su mayor virtud?
Creo que es que me la juego y que me banco las consecuencias. Soy inteligente, estudioso y que puedo hacer muchas cosas a la vez. Soy muy buen profesional, exigente conmigo mismo y con las otras personas y que posiblemente por eso no tengo mucho laburo generalmente.
-¿Y su mayor defecto?
Decir lo que pienso en los ámbitos que importan. No es un defecto para mí, sí para otras personas que suelen tener grandes discursos sobre equidad, género y son grandes manipuladores de conciencia. También agrandado como todo buen petiso asumido con mucha terapia.
-¿Cree en Dios o en algún ser superior?
Sí, la fe es una adhesión, una decisión y también es un derecho humano. Creer es un derecho humano como lo es no creer. Creo en Jesucristo, en el Jesucristo que asesinaron los poderosos porque temían que les quitara el poder y se lo diera a los pobres y creo en ese Jesucristo que no tengo ninguna duda hoy estaría del lado de las víctimas de abuso y rompería el negocio de las iglesias, de todas las iglesias que dicen que lo representan, que hacen negocio. No todas hacen esto.
-¿Le tiene miedo a la muerte?
No, la libertad es no tener miedo. Y la muerte es lo único seguro que tenemos y por eso vivo la vida a pleno, es hoy la vida. Disfrutémosla, digamos que queremos a las personas que queremos, ayudemos a los demás. Detengámonos en el camino si hay alguien que lo necesita y hagamos el amor.
-Si tuviera la posibilidad de volver a nacer, ¿en qué época y lugar le gustaría hacerlo?
Depende, si volviera a nacer como en la serie Outlander, que volvés al pasado pero sabiendo toda la historia. Yo volvería antes de la Segunda guerra mundial para evitar el Holocausto. Pero si es volver a nacer, sería en la antigua Roma y como ciudadano romano.
-Un libro que lo haya marcado.
Además de Conocerme me hizo libre, que si me está marcando mucho, es difícil elegir uno. El Señor Fischer de Ana Solari, El Fin del Armario de Bruno Bimbi, La Biblia, El Retrato de Dorian Gray, El General Seregni de Sergio Israel y Valeria Conteris, Las huellas que dejó Angola de Angelina Vunge, Historias de un amor no correspondido de Ana Laura De Giorgi, La Opción Entrañable de Luis Pérez Aguirre.
-Un sueño.
Sueño que nos despertamos del letargo, lo significativo de soñar despierto y también dormido es que parte de ese lenguaje simbólico universal que son las proyecciones de nuestra mente, quedan en algún lugar de tu esencia y eso siempre se notará en todo lo que hagas y cómo lo hagas.
-Una película.
Cinema Paradiso es una película a la que vuelvo cada tanto.
-Un músico o una banda.
Sui Generis.
-¿Por qué tanta gente descree de la política hoy?
Yo creo que hay una estrategia globalizada mundial para dividirnos y eso es un atentado a la democracia, después pensando en la política en sentido amplio, para hacer política hay que tener capacidad de soñar y por eso yo utilizo un término en mi libro cuando me refiero a la política, Angurriento que proviene del islam, en la que se aplica los pecados capitalistas, que es un término que se aplica a muchos órdenes de la vida, la dificultad de delegar, de trabajar en equipo, de ser transparente, para mí el verdadero pecado es comerse lo del otro, es desentenderse de las personas que tienen hambre real y simbólico. Aunque tengas un discurso contrario. En realidad porque nadie es inmune al poder y yo me he encontrado en distintas militancias con personas angurrientas y acá lo que importa es la compasión, el altruismo la solidaridad, el respeto. En definitiva ayudar a las personas, es el verdadero camino de la interdependencia y por lo tanto de la felicidad y eso es hacer política hoy.
-Una personalidad del Uruguay de hoy.
Belela Herrera sin duda alguna. Una luchadora incansable por los derechos humanos que son para todas las personas que con sus 95 años sigue siendo una cabeza renovadora porque la renovación no es algo de edad, sino mental.
-¿Habla otro idioma? ¿Cuál?
Viví muchos años en Italia, hablo algo de inglés y el jeringoso lo domino perfectamente.
-¿Qué cosa del pasado cambiaría si pudiera volver atrás?
Intentaría pedir ayuda de otra manera cuando abusaron y me violaron aunque no me culpo por eso ni culpo a las personas que no supieron protegerme. Los únicos culpables son los criminales que abusaban de niños, niñas y adolescentes y la sociedad cuando intenta y tapa y ocultar esto.
-¿Tv o series?
Series para despejarme la cabeza y Tv por trabajo.
-¿Cómo se informa?
Soy comunicólogo, me informo por todas las redes y por las tecnologías de la información. La radio me encanta y también me encanta leer en papel todos los diarios y semanarios.
-¿La mejor noticia que le dieron?
Cuando me propusieron ir a estudiar a Roma.
-¿La peor…?
Yo tenía 20 años y la neuróloga me dijo que mi madre tenía un tumor cerebral pero había que llevarla a Montevideo porque no había tomógrafo.
¿Qué le gusta de Paysandú?
El río de los Pájaros y las termas y que todo queda cerca. Ver caballos pastando en las calles, en las veredas y escuchar el tamborileo de los carritos. Es mi ciudad, ahí está mi familia, mis amigos.
¿Qué le cambiaría a la ciudad?
Lo que dice la ONU y es competencia de los gobiernos, el derecho a la ciudad, el derecho de todos los habitantes a usar la ciudad, para producir y transformar y disfrutar los espacios públicos para una vida digna. También plantaría muchos árboles.
-Me tomaría un café con ….
Charly García, es mi filósofo.
¿Cuál es el principal flagelo de la sociedad uruguaya hoy en día?
La pobreza, la falta de recursos para prevenir abordaje de proximidad con las familias en situación crítica, el acceso a la salud, al trabajo, las adicciones, la salud mental. No permitamos que ningún partido político o religión nos divida porque nos merecemos un país mejor y podemos tenerlo.
-¿Practica deportes?
Salgo todos los días a caminar, correr y meditar. Es algo que defiendo todos los días.
-¿La última vez que salió?
Vivo saliendo de los armarios en los que me encuentro, todos tenemos muchos armarios. Los otros días me tomé unos días en la playa que dicho sea de paso adoro para reflexionar y recomponer mis energías y centrarme con todo esto que está pasando.
-El futuro…
Es ahora porque no sabemos qué pasará mañana. Hay que priorizar a los niños, niñas y adolescentes. Que siempre son dejados de lado porque no votan y vivir la vida a pleno.