El balotaje del próximo hoy domingo será el 5º. luego de la reforma constitucional del ’97. La elección promete ser muy competitiva, con diferencia en las encuestas que están en algunos casos dentro del margen de error.
La inmensa mayoría dan casi siempre arriba al candidato Yamandú Orsi por encima de Álvaro Delgado, con diferencias que van entre los 12 mil votos y los 80 mil. De todas formas, en relación a la primera vuelta cuando proyectando el balotaje, la ventaja era de al menos 6 puntos, algo cambió. Luego de la primera ronda fue como ”barajar y dar de nuevo”. Lo mismo recordarán sucedió en 2019 cuando Daniel Martínez creció casi 8 puntos entre la primera vuelta y el balotaje.
El FA siempre vota muy bien en balotaje pero las estadísticas se pueden romper. La llave de la supuesta gobernabilidad la tiene el FA que tiene mayoría en el Senado no así ninguno de los bloques en Diputados. La coalición parecería que se está comportando mejor que en 2019, en aquel momento no eran una coalición. Ahora tienen experiencia de haber gobernado y se ha armado de mejor manera.
Lo más probable es que la ventaja sea mínima, que la elección sea reñida. Hay mucha incertidumbre. Se jugarán los próximos cinco años del país. La sociedad uruguaya no está “agrietada” pero en momentos electorales hay intolerancia y las familias se dividen. Hay que cuidar la familia, la democracia. Pensar en el día después es fundamental. La alternancia de los partidos en el gobierno permite a los ciudadanos sopesar y conocer las opciones. Es sano, en definitiva es lo que elige el soberano. Cada bloque peleará cada voto hasta el último instante. Hasta la última gota!
