El presidente del Frente Amplio, Fernando Pereira, visitó Paysandú para respaldar a los tres candidatos departamentales de su partido en la ciudad. Pereira destacó que, tras el triunfo en las elecciones nacionales de noviembre, donde la diferencia obtenida se acercó a los 100.000 votos, el Frente Amplio tiene un viento a favor que impulsa su campaña a nivel departamental.
Subrayó la importancia de disputar los territorios, enfatizando que las mejoras en una ciudad o localidad repercuten directamente en la vida cotidiana de los ciudadanos. Pereira señaló que, además del compromiso de los candidatos y la dirigencia local, el apoyo desde el ámbito nacional es fundamental. Anunció que en las próximas semanas una delegación de senadores y otros actores políticos del Frente Amplio visitará Paysandú para fortalecer la campaña y construir una mayoría en el departamento.
El líder frenteamplista resaltó que Paysandú es una de las intendencias que el Frente Amplio considera posible ganar. Para ello, enfatizó la necesidad de mantener la unidad y la cercanía con la ciudadanía, con la esperanza de lograr el triunfo electoral y mejorar la calidad de vida de los habitantes del departamento.
En relación con la participación de dirigentes nacionales en la campaña departamental, Pereira aclaró que no se trata de una intervención del gobierno nacional, sino de una actividad política partidaria. Indicó que habrá una gira de senadores, diputados y miembros de la dirección del Frente Amplio para apoyar a nivel nacional la campaña en Paysandú, respetando la conducción local de los tres candidatos y la mesa departamental.
Consultado sobre las posibilidades del Frente Amplio en Paysandú en comparación con otros departamentos del interior, Pereira manifestó que existen grandes oportunidades, pero que es necesario concretarlas. Señaló que la elección es abierta y competitiva, y que el Frente Amplio debe construir esperanza y presentarse como una alternativa al actual intendente Olivera, ofreciendo ideas, propuestas e iniciativas que convenzan a la ciudadanía.
Sobre los tres candidatos departamentales, Pereira indicó que mantiene un diálogo permanente tanto con ellos como con la dirigencia local. Destacó que su labor política incluye conversaciones con las direcciones departamentales, aportando elementos para la discusión política, información y evaluaciones sobre la situación de cada departamento basadas en encuestas y otros métodos científicos.
Al ser interrogado sobre las diferencias que ofrecería el Frente Amplio en la gestión departamental, Pereira recordó que, durante sus anteriores administraciones, se dejaron recursos significativos para la siguiente intendencia y se priorizó a los barrios con mayores dificultades económicas. Afirmó que el Frente Amplio tiene una sensibilidad especial hacia los trabajadores y hacia quienes están en peores condiciones, buscando siempre mejorar la calidad de vida de todos.
En cuanto a las encuestas, Pereira informó que se están realizando mediciones en Paysandú y que, probablemente, los resultados estén disponibles la próxima semana. Aseguró que, según las evaluaciones actuales, la elección es pareja y el Frente Amplio tiene una gran oportunidad de ganar, siempre y cuando se construya una mayoría y se aproveche el impulso favorable que se tiene actualmente.
Respecto a los municipios, Pereira reconoció su importancia, incluso en territorios considerados adversos. Mencionó que ha visitado casi todos los municipios del país y dialogado con alcaldes y concejales, entendiendo que son el nivel de gobierno más cercano a la ciudadanía. Señaló que el Frente Amplio debe aprender a ser más competitivo en estos territorios y que se trabajará en la construcción de un instituto de ciudades para analizar y desarrollar políticas adecuadas para cada rincón del país.
Finalmente, sobre la posibilidad de implementar el voto cruzado a nivel departamental, Pereira expresó que sería partidario de que el elector tenga la libertad de votar por un intendente de un partido y, eventualmente, por un alcalde o concejal de otro partido. Sin embargo, reconoció que esto requeriría una reforma constitucional y un debate profundo dentro del Frente Amplio, considerando que no era posible discutirlo en pocos meses después de las elecciones de noviembre.