Todo se analiza según el cristal con que se mire. Sumamos un punto, ¿o perdimos dos? El tiempo dirá.
Uruguay empató sin goles ante Corea del Sur en su debut en el grupo H del Mundial de Catar, en un partido en el que no se lo vio cómodo ante un rival que lo exigió, pero en el balance la Celeste estuvo más cerca con dos pelotas que se estrellaron en el palo.
Si la defensa era una de las dudas, la misma cumplió. Godín y Josema en buen nivel pero nos faltó desequilibrar arriba. Por momentos pareció el equipo del Maestro, en su peor versión.
Los asiáticos presionaron en el inicio buscando complicar la salida de los nuestros, que trataron de asentar líneas.
Bentancur era el hombre más retrasado de los volantes, encargado de recibir y ser pistón en la salida, mientras que Núñez, volcado sobre la izquierda y Pellistri, sobre la derecha, estaban obligados a recorrer la banda, también defensivamente.
La primera vez que los celestes pisaron el área rival fue a los 12’, cuando Vecino peleó una pelota que luego se llevó Olivera.
La pelota larga comenzó a ser una opción para Uruguay y así apareció un pase largo de Giménez que bajó Valverde, pateó sin pensar y salió apenas alta.
Otro pase de larga distancia lo aprovechó Facundo Pellistri, que le ganó la espalda al lateral por derecha y la puso al medio de cabeza, pero Núñez no llegó a conectar.
A esa altura, nuestra selección se paró en el cotejo con otra prestancia, ya era más peligroso y podía hacer entrar mucho más en juego al Halcón, lo cual siempre da beneficios.
La apertura pudo llegar en una gran contra tras una conducción de Olivera por carril central, pero que careció de precisión a la hora de darle la asistencia a Núñez para la definición por izquierda.
Y a los 33’ sufrimos el gran susto del partido cuando los de Bento generaron una gran asociación de toques, poniendo la pelota entre Olivera y Giménez para que Na solo, pusiera la asistencia a Hwang Ui-Jo, que pateó desde el punto penal y la mandó muy alta ante la desesperación de Rochet.
Suárez no entró en partido, fue controlado.
A los 43’ llegó la chance más clara de todas y fue de pelota quieta. Un córner que conectó con testarazo Diego Godín ganando en el área, dio de lleno en el palo cuando Seung-Gyu Kim ya nada podía hacer. Empate sin goles y al descanso.
El complemento inició de la misma forma que lo anterior, con los coreanos manejando el esférico, tratando de asociarse y terminar desbordando por las bandas y obligando algún corte preciso de la defensa para que no pasara a mayores.
A los 62’, una corrida de Núñez tras un pelotazo de Godín lo encontró ganando en velocidad, entrando al área, pero muy solo ante la defensa ya que el Pistolero se fue al segundo palo. No pudo concretar y un minuto después se dio el ingreso de Cavani por el delantero salteño.
Con el crecimiento de Bentancur y alguna aparición de Valverde, el equipo comenzó a manejar algo más la pelota, tocando, tratando de avanzar, pero sin ideas para los cierres de las acciones, que generalmente terminaron en centros.
Un remate de Jo desviado fue la antesala para el ingreso de Viña y De la Cruz por Olivera y Vecino, tratando de aprovechar el cierre para buscar algo más, que pudo llegar a los 81’ cuando Núñez enganchó, remató cruzado y salió muy cerca.
El último intento del entrenador fue colocar a Guillermo Varela por Facundo Pellistri a los 87’, acción final para ir por los tres puntos con algún centro que encontrara soluciones.
Un remate de Federico Valverde que reventó el palo a los 89’ hizo ilusionar a todo un país, pero la suerte no estaba del lado celeste, en un duelo que pareció irse sin goles.
Ahora el margen de error es menor.