Desde la filial local de la Asociación de Maestros del Uruguay (ADEMU) se denuncia que el año pasado sucedieron “varios” episodios de violencia contra docentes en el propio ámbito escolar y de parte de familiares de alumnos. La dirigente Laura Dessimoz aseguró que los hechos ocurrieron, especialmente, en el transcurso de los dos últimos meses del año lectivo y lamento que “en general” los docentes no tuvieran apoyo de la Inspección Departamental.
“Sobre todo en los últimos meses del año hubo muchas situaciones muy complejas en varias escuelas de Paysandú, casos de agresión verbal hacia los docentes delante de los propios niños”, relató Dessimoz y si bien identificó que los maltratos provinieron de los mayores de los alumnos dijo que la organización “no culpa a las familias porque habría que ver, en profundidad, las situaciones que la gente está pasando y sucede que terminan explotando por algo sencillo”.
Ante un extremo de esas características la Dirección del centro “debe informar inmediatamente a la Inspección que debe presentarse en el lugar, el inspector departamental o el inspector de zona para dar apoyo y tratar de resolver la problemática”, detalló la dirigente y agregó que “en general” eso no sucedió. “Nosotros creemos que el inspector departamental y los inspectores zonales tiene que cumplir un rol de acompañamiento, de respaldo, de estar en momento, en la situación” pero, sostuvo, que a nivel local esa presencia se ha limitado a algunos casos y que allí se brindó un acompañamiento “muy levemente”.
Dessimoz dijo que desde algunas direcciones escolares se ha sugerido a los docentes víctimas de violencia en el ámbito de trabajo “que no nos avisen, que no le avisen al sindicato, pero nosotros nos enteramos enseguida gracias a los compañeros”.
La organización no tiene una cuantificación de esos episodios y, en consecuencia, es imposible establecer una comparación con años anteriores, pero sí aseguran que “sobre todo en los últimos dos meses del año se dieron varias situaciones de gritos, de insultos, de amenazas, de violencia”. La referente enfatizó que las autoridades departamentales de Primaria “no pueden permitir que estas situaciones se naturalicen, que sean algo normal, común” y reivindicó el rol del gremio “que intervino siempre, que fue a las escuelas, que estuvo junto a los compañeros”.