Mañana culmina un raid de tres días de un encuentro de fans del grupo musical de Los Iracundos. El deceso de su principal figura Eduardo Franco el 1º de febrero de 1989 es el motivo que logra nuclear desde hace años a seguidores del grupo que provienen de diferentes países de Latinoamérica.
Julito Baccaro es una pieza clave en este trabajo que sin dudas genera turismo en Paysandú con múltiples actividades que se realizan.
En la noche del martes en la sala de conferencias del Gran Hotel, sala colmada, vimos un trabajo excepcional de Baccaro que guarda, atesora, todo tipo de recuerdos del grupo que trascendió fronteras.
En la ocasión estaba el director de turismo, José Galván a quien lo consultamos sobre el anunciado Museo que se habló hace unos años. Un museo interactivo, moderno, que permita escuchar videos, música, posicionaría a Paysandú y traería visitantes. Saber gestionarlo es clave y seguramente habría que cobrar una entrada, como pasa en otros lugares del mundo.
Galván nos respondió que no estaba en su órbita y lo entendemos. “Lo amerita” dijo.
Además del mural, del busto de Franco, de más cosas que ofrece Paysandú como su casa, el recorrido en bus, quizás amerite la idea considerar la posibilidad de algo diferente, aggiornado a los tiempos que corren.
El ex local de UTE de 19 de abril y 18 de julio fue ofrecido para tal fin. Pero nada más se supo luego de tres años.
