Radar Musical del jueves 16 de febrero. José Brunini
Magisterio…Poesía…Música
Por haber compartido tiempo y momentos -ella en la dirección y este cronista como profesor de música- en el Colegio Master, nos valió conocer a una mujer plena de sensibilidad, firme en sus principios, comprometida con la cultura. Se ha jubilado pero ¡claro!: no se deja de ser maestra. Paralelamente desarrolla su condición poética, a través de bellísimos poemas donde es dominante lo romántico, lo testimonial y hasta entregas para niños. Buena parte de este material se encuentra reunido en sus libros «Poemas en el mar» y «Cenizas». Abraza la música -guitarra, canto, composición- seguramente siguiendo los pasos de su padre, Ernesto Bentancor, recordado cantautor y concertista de guitarra. Referimos a ESTELA BENTANCOR CONDE. Le propusimos un «ping pong» y lo aceptó. A él vamos…
Ser maestra. ¿Vocación, profesión, pasión?
«Todo eso amalgamado»
¿Cómo surgió tu inclinación por la poesía?
«Como una necesidad impostergable»
¿Y la música cómo apareció?
«Desde que nací a través de la guitarra y de la voz de mi papá y mi mamá»
En general, globalmente, ¿es Paysandú una comunidad culta?
«Si, no, a veces, mucho, poco…»
¿Hay música buena y propuestas «mediocres»?
«Creo que hay ambas y calificarlas depende también de cada persona»
¿Han musicalizado tus poemas?
«He tenido algunas ‘ofertas’, sí. Espero oír «Canto rodado» alguna vez (bromita), así la puedo integrar a mi repertorio. Yo misma le he puesto música a varias»
¿Qué le recomendarías a un creador (de poemas, de poesías) emergente?
«Estudiar los recursos de la poesía, releerlas, dejarlas decantar, corregir»
Algo para agregar…
«Que la poesía nos acompañe hasta morir»
Cuando Estela refiere a «Canto rodado», se trata de un poema al que nos hemos permitido adicionarle melodía y ritmo. Aún no lo ha escuchado…Es que a nosotros «no nos conforma» del todo. Y debemos ser exigentes, sobre todo por no lesionar la calidad del texto. Claro: ¡cómo nos estamos demorando!…