Los técnicos de espectáculos: bichos raros si los hay. ¿Quiénes son? Si me lo preguntan a mí, fácilmente podría responder son las personas que trabajan en eventos, escenarios, que arman y desarman. Son los que ponen luces, parlantes, instrumentos y realizan infinidad de tareas que la mayoría del público desconoce.

Si me extiendo un poco más les diría que es gente que trabaja, horas y horas para hacer de un show algo que no olvidarás.  Pero su trabajo es invisible para el público, por eso, rara vez los verás… “Porque los técnicos del espectáculo son los que no se ven”.

Son los primeros en llegar y los últimos en irse, son los que con su conocimiento y cuerpo hacen posible vivir la magia del espectáculo. Los que en algunas ocasiones reciben el agradecimiento de los artistas y lastimosamente quienes con frecuencia reciben los insultos cuando algo no sale bien.

Pero este trabajo aunque lo elijo día a día, tiene un trasfondo que todos olvidan, porque la atención se centra en los espectáculos propiamente dichos.

Los técnicos del espectáculo somos quienes arriesgamos nuestras vidas cargando o trepando a las estructuras, conectando y desconectando,  somos los que cumplimos extensas jornadas laborales. Sin perder de vista que con suerte comemos cómodos, porque es muy común vernos con comida rápida sobre un baúl, porque los tiempos apremian y hay que seguir.

Hoy me toca pararme desde el dolor, porque tengo que afrontar una pérdida irreparable. Hace unos días despedimos a uno de los técnicos del espectáculo que hizo brillar tantos artistas en el escenario. Por razones que todavía no logro comprender,  se nos adelantó en el viaje.

En lo personal un tipo a quien elegí y el eligió ser parte de mi familia. El tío Seba, Sebiche o el gordo canicas como le decíamos… Compañero de jornadas interminables de trabajo en nuestro amado teatro Florencio Sánchez, casa de las artes donde dejamos lo mejor.

Con Seba creamos espacios, utilerías, escenografías, llevamos adelante la instalación de los equipos donados por el gobierno chino allá por el 2019, diseñamos y llevamos adelante muchísimos espectáculos en lo técnico, tanto propios como ajenos. Dimos lo mejor y en alguna ocasión también tuvimos que pararnos con el puño en alto y pelear por mejores condiciones laborales. Formamos parte del movimiento de técnicos allá por el 2020 cuando por la pandemia nos pararon y dejaron sin sustento a nuestras familias. (No directamente a nosotros pero si al sector)

Es difícil definir lo que fue Seba mientras trabajaba, elijo decir que dio muchísimo a la cultura desde un lugar donde creaba la magia de la luz. Cómo técnico y diseñador de iluminación para los eventos desplegó un arte con marca propia.

Hoy todavía siento que al cruzar las puertas de nuestro querido teatro lo veré sentado en la consola programando o subido en las cerchas enfocando alguna luz, pero ya no….

Serán otros quienes hagan la tarea y de seguro lo harán con la misma pasión y entrega, pero no será el Sebiche, ya no me gritara «Tarantini vení que se me ocurrió una idea» o «contame que te anda pasando». Ya no tendré esas charlas donde nos decíamos nuestras penas y alegrías… Quedo en el debe hacer nuestro espectáculo propio…

Te me adelantaste amigo mío…ya no será lo mismo. Tus compañeros del mundo loco de los técnicos te van a extrañar.

Hace tu magia e ilumina el cielo.

QEPD Sebastián Marisco.

Adolfo Schulze. «Kuliyo»

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